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Limpiar la piel. Para conseguir una buena limpieza facial es recomendable que mezcles el aceite de ricino con otro aceite como el de albaricoque o de oliva, así podrás conseguir limpiar la piel en profundidad, hidratarla, tonificarla y, además, eliminar los restos de grasa. Para retirar el aceite te recomendamos usar discos suaves humedecidos a toquecitos. Consigue eliminar la suciedad de la piel, así como los restos de maquillaje, por lo que es el desmaquillante perfecto.
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Hidratación y antiacné. El aceite de ricino está compuesto por ácidos grasos y vitamina E, esto lleva a que su uso logre un resultado hidratante y suave en nuestro rostro. Además, aunque parezca contradictorio, este aceite ayuda a reducir la inflamación y la aparición de acné. Para conseguir este efecto es necesario que sigas una serie de pasos: en primer lugar, enjuaga el rostro con agua tibia, así conseguiremos abrir los poros. A continuación, coloca una pequeña cantidad del producto sobre las zonas afectadas por el acné, déjalo actuar durante el mayor tiempo posible y posteriormente enjuágalo.
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Fortalecer las pestañas. Consigue unas pestañas más fuertes y largas aplicando una pequeña cantidad sobre ellas cada noche. Es necesario usarlo con constancia y durante un periodo de tiempo prolongado, pero terminarás viendo mejoras.
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Favorecer el crecimiento del pelo. Debes aplicar el aceite de ricino sobre las zonas de caída masajeándolo suavemente. Eso llevará a una mejora en la circulación sanguínea, favoreciendo así el crecimiento del cabello. Al igual que ocurre con las pestañas, para ver resultados, es recomendable que realices este proceso durante algunos meses, una o dos veces en semana
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Cuidar el cabello. El aceite de ricino para el pelo es el complemento perfecto para lucirlo bonito e hidratado. Gracias a sus componentes, podemos disfrutar de un pelo más sano y fuerte, incluso dejando tu cabello como recién cortado. Aplícalo directamente en las puntas para conseguir un mejor resultado. Es recomendable que lo dejes actuar durante horas y después laves tu cabello como lo haces normalmente.
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Endurecer las uñas. Aplícalo con ayuda de un algodón sobre las mismas para conseguir fortalecerlas.
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Reducir inflamaciones. El aceite de ricino es utilizado también para mejorar las inflamaciones tanto en articulaciones como en músculos.
